En su habitual estilo el PP, ahora que las elecciones se acercan, sigue generando confusión, enredando, poniendo los muertos encima de la mesa, etc. Lo de siempre, vamos. Para colmo, tras la última de los jueces del Constitucional, se dedica a atacar la división de poderes y la independencia judicial; se dedica a acusar a unos y otros de actuar en connivencia para defender intereses espúreos. Piensa el ladrón que todos son de su condición, especialmente cuando el responsable directo de estas actuaciones es Trillo, el del Yak 42. Quousque tandem abutere patientia nostra? (Cicero dixit)